Tratamiento de las quemaduras
Si tu hijo se quema con el sol, colócale un paño húmedo y fresco sobre la piel afectada 20 minutos como mínimo para calmar su incomodidad. Tu médico quizá te recomiende ibuprofeno o acetaminofén. Una pomada oleoso como la vaselina o una loción humectante como el aloe vera ayudarán a sanar la piel de tu hijo, aliviar su malestar y evitar la resequedad de la piel. Si la quemadura se ampolla, es una quemadura de segundo grado y debe verlo un médico.
Nota:
Evita que la piel vuelva a quemarse: Cualquier piel que ha sido dañada por el sol debe estar protegida en forma adicional durante todo un año.