El parto es el proceso normal de apertura del cuerpo de la mujer, hacia el encuentro con la maternidad. Como todo proceso del ser humano, resulta imposible separar el aspecto biológico del psicológico. Es por esto que, lo que sucede en el cuerpo de la mujer, repercute directamente en su estado emocional.
Expresar sus sentimientos
La mamá va a expresar sus sentimientos de diferente forma: puede querer llorar, gritar, insultar, o por el contrario, puede encerrarse en ella misma, manteniendo el más absoluto de los silencios. Es normal que aparezcan las más diversas manifestaciones, y que sus actitudes vayan cambiando a medida que avanza el trabajo de parto. Muchas veces pasan de un extremo a otro, en tan solo minutos. Expresarse es sano para la mujer, no tiene que inhibirse por estar en el hospital, y menos por el personal de salud.
Cómoda y confiada
Si la mamá se siente cómoda y confiada en su entorno, esto facilitará que se segreguen las hormonas necesarias, para el desarrollo del proceso fisiológico natural. Lo más importante, es que la mamá y su referente, puedan disfrutar y apropiarse de este momento. El estar informados y actualizados, van a ayudar a que la mamá se sienta dueña y protagonista de su parto.
¿Qué podemos hacer para disfrutar de nuestro parto?
- Imagina cómo será el parto, y piensa en aquellas cosas y personas que te gustaría que estuvieran. Conversa con tu médico la posibilidad de que estás cosas sucedan.
- Pregúntale al médico todas las dudas que te surjan.
- Asiste a talleres de preparación para el parto.
- Resulta útil realizar yoga o gimnasia dirigida especialmente para embarazadas. Te enseñaran formas de respirar y ejercicios que utilizarás en el momento del parto.
- Infórmate sobre las rutinas e intervenciones comunes. Pregúntale a tu médico si las practica, y hazle saber cuáles te gustaría evitar. Juntos pueden encontrar la forma de prevenirlas.
- Elige quien deseas que te acompañe en el trabajo de parto y parto. Recuerda que existe una ley que te ampara al respecto, puedes estar acompañada por quien desees durante todo el proceso, ya sea parto vaginal o cesárea.
- Finalmente, cuando llegue el momento, concéntrate en disfrutar y confiar en el centro de salud que has escogido.