Si amamantas, sabes que alimentarlo es una experiencia maravillosa que hace que tú y tu bebe se sientan más unidos. Sin embargo, todo lo bueno tiene un fin. ¿Cómo sabrás cuando es la hora del destete?
No existe una edad determinada o mágica para el destete. Siempre y cuando tú y tu bebe estén felices, puedes continuar amamantándolo hasta que se convierta en un niño. Vale la pena destacar que, al darles tiempo suficiente, los bebes se destetarán naturalmente, reducirán las tomas gradualmente mientras que aumentan la ingesta de alimentos sólidos, y eventualmente dejarán de amamantar.
A continuación, mencionamos tres indicios de que el destete ha comenzado naturalmente o que es hora de que comience:
1. El bebé está muy ocupado como para amamantar Una vez que tu bebe comienza a caminar, es posible que esté muy ocupado explorando su mundo para quedarse quieto y tomar leche, especialmente durante el día. No te sorprendas si todavía te acaricia con la nariz para acercarse a tu pecho antes de la hora de acostarse o cuando necesite cariño.
2. El paladar del bebe cambia con los alimentos sólidos. Una vez que tu bebé descubre los alimentos sólidos, es posible que pierda interés en la leche materna porque le interesan los nuevos sabores y texturas que le ofreces ahora. Sin embargo, debes recordar que los alimentos sólidos no deben reemplazar la leche materna o la fórmula antes del primer año de tu bebé. Por el contrario, debes pensar que los alimentos sólidos son un complemento de la leche materna (o leche de fórmula) hasta que tu bebe cumpla un año de edad.
3. Tu estilo de vida cambió. La vida del bebe no es la única que está cambiando. Un nuevo embarazo, un cambio en la situación laboral, un cambio en el cronograma, actividades nuevas, o simplemente el deseo de disminuir la frecuencia de amamantamiento son razones válidas para comenzar el destete de tu bebe.
Si estás destetando a tu bebe (o él se está destetando), no te olvides que su sistema digestivo es muy delicado y no estará listo para tomar leche de vaca hasta que no tenga un año de edad. Hasta esa edad, ofrécele leche materna o de fórmula en un biberón o taza para complementar los alimentos sólidos. No importa cómo o cuándo empieza el destete. Debes marcar esta transición como otro paso positivo en el desarrollo de tu pequeño.